Departamento de Seguridad.

La Ley 05/2014 de 04 de abril de Seguridad Privada lo deja muy claro; es en ella donde se ve la importancia vital del Departamento de Seguridad, y por ende, de la figura que lleva a cabo su responsabilidad al frente de este Departamento, que nos es otra que el Director de Seguridad.

Una figura clave en todos los sentidos para la buena marcha de la empresa, algo desconocida por la sociedad, pero de vital importancia sea cual sea la actividad de la compañía, como pueden ser hospitales, organismos públicos, entidades deportivas, hoteles, logística, etc. Cabe recordar que no todas las compañías tienen Departamentos de Seguridad, ni todos son iguales, aunque al frente sí o sí debe estar un Director de Seguridad.

Dentro de la estructura del Departamento de Seguridad, la figura del Director de Seguridad se antoja clave; ahora más todavía. Hemos comprobado la obligación, de alguna manera, de formar al personal conforme a la situación actual, cosa impensable hace poco más de un año. La población mundial no se imaginaba que sufriríamos una pandemia mundial y que los Directores de Seguridad tendrían que implementar otras políticas de seguridad, en la mayoría de los casos desconocidas, para nuestras instalaciones y, por supuesto, para nuestro personal.

Todas estas acciones se han tenido que hacer conjuntamente con otros departamentos, como el de PRL, y la Dirección de Operaciones de la empresa. Y así ha sido. Si antes de la pandemia cobraba especial importancia la figura del Director de Seguridad ahora se ha visto más que nunca que es imprescindible para capitanear el rumbo del Departamento de Seguridad. Y se ha hecho añadiendo empatía, inteligencia emocional y colaboración con los demás departamentos fundamental el de “Prevención de Riesgos Laborales”.

El Departamento de Seguridad está integrado en la estructura de la compañía, siendo una “pata” importantísima que debe colgar directamente de la Dirección General por su cometido y responsabilidad, con la prioridad de velar por el buen funcionamiento de todo lo referente a políticas de seguridad y protección de la empresa, y con la inclusión de un tiempo a esta parte de la Ciberseguridad, que hemos visto y comprobado que durante la primera oleada de la pandemia, cuando sufrimos el confinamiento al que nos vimos sometidos, se multiplicaron los delitos cibernéticos de todas las clases y por miles.

El mayor activo que tienen las empresas sin duda, son sus empleados, es ahí donde toma especial relevancia el adoptar una política de Seguridad Integral en todos los sentidos, acorde con las leyes actuales y con la actividad de la propia empresa.

El Director de Seguridad, como responsable del Departamento de Seguridad, será quien aplique y ponga en funcionamiento estas políticas y actuaciones en materia de Seguridad que haya que adoptar.

Como en todo Departamento, hay que cumplir con unos objetivos y estándares teniendo unas prioridades. No hay que olvidar que, a parte de la gestión en seguridad física y lógica ahora se le une la protección en Ciberseguridad. La situación actual, requiere la implantación de esas políticas, adaptándolas a la compañía, sabiendo que cada departamento tiene unas circunstancias propias, y las personas que en él desarrollan su labor también.

En el Departamento de Seguridad se pone de manifiesto, la suma importancia que desempeña el papel de la protección y de la seguridad, y con mayor motivo en estos momentos.

Además de las funciones normales del Departamento de Seguridad, comenzando por la de coordinar la relación necesaria entre la empresa y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y, en su caso, con Protección Civil y servicios de emergencia, se añade hoy la de proteger todos sus activos contra la COVID-19.

Uno de los objetivos del Departamento de Seguridad será velar y garantizar la protección de las personas, los bienes, valores, negocios de la empresa y el normal funcionamiento de los servicios, así como la Ciberdelincuencia, dotando de las herramientas, materiales y sistemas necesarios para crear un Sistema de Seguridad Integral, adaptando las diferentes fases del Plan Director de Seguridad.


De este modo el Director de Seguridad valorara la situación a tener en cuenta, con el análisis de riesgos previo, pudiendo atender todas las necesidades de la compañía, en este caso en cuanto al COVID-19, protegiendo a las personas, poniendo a disposición todos los recursos necesarios y creando una burbuja para la protección dentro de las instalaciones. En este sentido cobra especial atención el sentido común de cada persona. Serán los departamentos de PRL y Seguridad, donde convivan, los responsables de formar e informar a los trabajadores sobre la situación actual y la forma de llevar a cabo su protección y la de sus compañeros, dentro y fuera de las instalaciones.

En los Planes Integrales de Seguridad no se preveía un escenario de estas características, pero como documentos vivos que son, se han tenido que actualizar, implantando nuevas actuaciones, ante un enemigo totalmente desconocido que ha demostrado su letalidad, sobre todo con nuestros mayores. Se ha trabajado día a día y sin saber cómo o por dónde nos iba a atacar este enemigo, pero sabiendo que cada día se cobraba la vida de muchas personas.

El Departamento de Seguridad como tal, debe ser un departamento autónomo, con comunicación directa con la Dirección General, pero con total independencia interdepartamental, recordando que al frente se debe encontrar un Director de Seguridad habilitado por el Ministerio de Interior.

Es el Director de Seguridad, el que debe implantar el Plan Director de Seguridad, y elevar al nivel que merece la implantación de la seguridad, para el buen desarrollo de la actividad de la compañía y la protección de las personas que desarrollan su labor en estas.

Es sumamente importante que al frente de un Departamento de Seguridad esté un verdadero profesional de la seguridad, así como el equipo que conforme, actuando en conjunto, planificando todo lo que pueda acontecer, analizando todos los riesgos posibles, actuando como un equipo homogéneo, integrando a todos los actores posibles con experiencia en el campo de la seguridad, formándose en todo lo relacionado con la seguridad y colaborando con los demás Departamentos e Instituciones Públicas y Privadas.

Con esta integración, se conseguirá crear un Plan Integral de Seguridad, el cual se podrá adaptar rápidamente, recordando que estos planes deben ser documentos vivos, para poder actualizarlos y modificarlos en cualquier momento.

Insistimos en que la relación con los distintos departamentos ha de ser totalmente fluida, colaborativa y empática, trabajando en equipo, pero sin olvidar, que quien tiene la responsabilidad en materia de seguridad es el Departamento de Seguridad con el Director de Seguridad al frente.

En los últimos años hemos visto mejorado el reconocimiento a nuestra labor, y ese reconocimiento hay que hacerlo extensivo a todo el personal de Seguridad Privada (Vigilantes de Seguridad, de Explosivos, Escoltas Privados, Jefes de Seguridad y Guardas Rurales, así como también Detectives Privados), con mucho mayor motivo por el trabajo realizado durante la pandemia. Una labor arriesgada, en primera línea de acción.

Brindemos un especial homenaje, a todas las personas que se fueron, por culpa de este enemigo que apareció en nuestras vidas hace un año y que tantas familias ha destrozado.

Álvaro Raúl Palomero Ruano
Director de Seguridad
Seguridad Internacional y Geopolítica

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