La invitación a participar en Crónica Seguridad, surgida de la Dirección y el Consejo Editorial de la revista, me hizo plantearme unas intenciones concretas en cuanto a la temática a desarrollar, así como a su exposición. Avanzar algunas ideas básicas sobre la competencia profesional me pareció una buena forma de comenzar.
Sin duda el campo sobre el que gira esta actividad divulgativa es ingente y extenso, y a cada paso demanda profesionales con mayor cualificación, que no solo sean expertos en su materia, sino que tengan la capacidad y competencia profesional [1] suficientes, para ejecutar sus funciones en un entorno globalizado, donde cada vez se hace más patente una necesaria visión integral de todo el conjunto.
El desarrollo de estas actividades integradas dentro de las políticas públicas de nuestro propio ordenamiento, y en el contexto jurídico de la Unión Europea al que también pertenecemos, hacen necesarias las adecuaciones y actualizaciones en el sector privado al igual que en el público. El hecho de constituirnos, en este tejido laboral, como unos buenos profesionales (en cualesquiera de sus escalas), no exige solo de titulaciones académicas que una vez obtenidas nos permitieran dejar de seguir aprendiendo sobre el sector en el que operamos, sino que pone de manifiesto las circunstancias de una permanente formación teórico-práctica, para ser más eficaces y eficientes ante las necesidades productivas en nuestro ámbito de trabajo.
Ante la situación actual, que comienza a vislumbrarse con mayor definición, se entablan nuevas necesidades formativas a nivel teórico y también práctico, en donde se precisa el desarrollo de nuevos programas formativos con objetivos a corto, medio y largo plazo, que deben coexistir, disponiendo soluciones a materias interrelacionadas tales como la prevención de riesgos laborales, autoprotección, seguridad del medio ambiente, habilidades organizativas y de comunicación, gestión de emergencias, etc…
Evidentemente la creación de perfiles y puestos de trabajo, conllevan un conocimiento y experticia, concretos e inherentes -hablamos de competencia profesional- que son demandados por nuestra sociedad a través de los sectores privado y público. El hecho de mantener y captar a estos buenos profesionales en nuestras empresas pasa por mantenernos competitivos en este mundo cada vez más tendente a predisposiciones e interrelaciones globales. Dicha circunstancia nos conduce al concepto del know-how[2], en el que además de contar con recursos humanos que nos fortalecen -pues poseen ese know-how- debemos disponer de estrategias para conseguir que la experticia obtenida por nuestro personal forme parte de nuestra empresa, manteniendo un desarrollo constante, y procurando que este personal experto permanezca con nosotros para enriquecer a miembros venideros.
El campo de las ya oídas cualificaciones profesionales, en relación a la formación de carácter reglado y no reglado, ha generado un instrumento que trata de facilitar la movilidad, reconocimiento de la formación académica y profesional de los ciudadanos, en un contexto como el definido por el Marco Europeo de Cualificaciones (MEC en castellano, o EQF siendo su acrónimo en inglés de European Qualifications Framework, https://ec.europa.eu/ploteus/content/descriptors-page). Como podemos observar la movilidad laboral y el proceso de globalización desde hace años un hecho consumado.
Ante este nuevo escenario de movilidad laboral y permanente aprendizaje frente a los nuevos avances en las diferentes materias, mediante este apartado en la presente publicación, pretendemos tratar: temas de actualidad y el potencial ámbito prospectivo, en relación a la gestión de emergencias y riesgos específicos, concerniente con la aplicación práctica de los planes de autoprotección o emergencias, conceptos de lucha contra incendios y explosiones, programas de formación frente a contingencias catalogadas, intervenciones con sustancias y mercancías peligrosas en planes de emergencia interior y exterior, riesgos en el sector de energías renovables, adecuación formativa en infraestructuras críticas, etc…
Aunque en próximos números se vayan publicando contenidos específicos, a través del contacto con la Editorial, podéis proponer cualquier sugerencia o temática a desarrollar, tanto en este apartado como en otros, ejerciendo con vuestra participación un necesario feedback, para responder a vuestras exigencias de la manera más óptima posible.
Estando a vuestra disposición, esperamos que sea de vuestro agrado esta nueva publicación. Recibid un cordial saludo, atentamente David Rodríguez.
David Rodríguez Carrasco
Criminólogo. Técnico respondedor NRBQ.
[1] Competencia.- Conocimientos y experiencia precisa demandadas ante un determinado perfil profesiográfico para ejecutar un trabajo.
[2] Know-how.- Podemos entender dicho concepto como la experiencia o práctica prolongada que poseen algunas personas en el desarrollo de una labor, la cual genera un aprendizaje no siempre académico, que incluye una optimización adecuada del conocimiento y habilidad ante determinadas tareas, para que sea ejecutada de una manera eficaz y eficiente dentro de un sistema.